El Belén

Hola!

Os gusta la Navidad? A mí me encanta! Así que hace unos días montamos el árbol y hoy ya tenemos también el belén. Este año ha sido más especial porque es la primera vez que monto en mi casa el belén de mi abuela. La verdad es que lejos de ponerme triste estoy muy contenta ya que he revivido ese momento mágico de cada año junto a mi abuela y me ha gustado esa sensación. 

La verdad que el belén de mi abuela es un circo, no ahora porque lo tenga yo no, lleva así años. Anda que no nos hemos reído veces mi primo Jose y yo porque en el belén había
un oso polar. Sí así como suena, un oso polar y un tigre y un león todo hay que decirlo,y es que mi abuela no le hacía ascos a nada así que porqué no iba a poner animalitos salvajes en belén.

También es muy peculiar porque tiene medidas de todo tipo, hay cabras más grandes que las personas, el nacimiento es más pequeño que los habitantes que se acercan a conocer al niño y hay dos pozos uno tamaño trailer y otro chiquitito a juego con los mini animalitos que habitan por doquier.

Es como poco curioso de ver, porque tiene detalles de sello personal como la lavandera en el río y su tendedero hecho a mano, por supuesto, con un alambre, dos corchos y su ropita tendida. Y es que mi abuela era así, tenía detalles que la hacían única, por lo tanto su belén tenía que ser único también, obvio.

Os dejo unas fotos para que veáis lo bonito que es. No tiene luces, es la pena pero es que no tengo ningún enchufe cerca así que por lo menos este año se queda sin luz.

Para ti yaya con todo mi amor. Lo he montado escuchándote como si me hablaras, he puesto los corchos treinta veces distintas hasta dar con la clave, ahora entiendo bien porque eran tan importantes las piedras. Si estuvieras aquí hubieras puesto al pastor en la montaña y la tierra del que ara estaría mejor puesta pero es que eso siempre lo hacías tú... Te he escuchado decirme "quita" para darle tu toque a las figuritas del camino. También me he reído al ponerle el agua a los camellos del desierto, otra de tus ideas geniales como no. En el río he sustituido el papel de plata por unos flecos azules que quedan muy bonitos y contaminan menos y las casas de recuerdos de Ibiza y no se cuantos pueblos más, han pasado a mejor vida. Por lo demás, todo está como siempre. Como nos gustaba. Gracias yaya por hacerme sentir la magia de encender las luces como si con ellas la vida mejorara. Gracias por disfrutar las navidades y contagiarme de ellas desde pequeña. Gracias por tanta ilusión concentrada en unos cuantos adornos y un pueblecito donde todo cabe. Gracias por tu belén. Gracias por tantos recuerdos bellos que has dejado en mi alma.