sábado, 28 de julio de 2018

Siete años sin fumar


Hoy hace siete años que dejé de fumar y sigue siendo la mejor de las decisiones.

Cuando era fumadora pensaba que me encantaba fumar porque a más yo era de los llamados “fumadores empedernidos” que apagaba uno y encendía otro. Así pasaron 16 años fumando dos paquetes diarios incluso algo más en noches de fiesta y tal.

Mi convencimiento de que me gustaba era absoluto porque prefería fumar a comer o pasar frío con tal de dar unas caladas a mi amado vicio y soltaba alegremente esa frase tan típica de todo fumador que dice “de algo hay que morir”

Pero casi sin darme cuenta lo que me encantaba tanto en realidad no era una decisión mía, al revés yo era esclava del tabaco. No fumaba tanto porque me hacía feliz sino que tenía necesidad de fumar que es muy diferente. Yo no controlaba